"SON NEGROS, DE ÉBANO Y DE ORO"
Por Rafael E Yepes-Blanquicett
Son del pueblo, vienen de abajo, son pobres, sin muchos recursos o casi ninguno y no pertenecen a ningún "club social de estrato seis". Son trabajadores, honestos, y se han hecho por sí mismos, con las uñas, sin apoyo oficial.
Por eso, no le deben nada a nadie. Pero, ahora que son famosos y han triunfado en sus diferentes disciplinas, aparecen los mismos politiqueros oportunistas de siempre sacando pecho y enorgulleciéndose de sus logros que solo les pertenece a ellos, a sus familiares y entrenadores que los han apoyado en todo momento y lugar.
Son nuestros mejores embajadores y representantes ante el mundo, quienes han dejado en alto el nombre de Colombia, nuestro país, en innumerables ocasiones y ¡de qué manera!.
Son lo mejor de lo mejor, lo más granado, los más excelsos en la arena deportiva. Nuestros grandes medallistas olímpicos y mundialistas, en oro, plata y bronce, Caterine Ibargüen, Oscar Figueroa, Yuberjén Martínez y Yuri Alvear, de los cuales, los tres primeros son antioqueños de pura cepa, aunque Oscar se crió y se formó como deportista en el departamento del Valle del Cauca.
Brillan con la luz propia que sale de adentro de sus almas, grandes esfuerzos y sacrificios por salir adelante, pues todas sus vidas han estado ligadas a las dificultades de todo tipo que han tenido que sortear para sobrevivir. Sin embargo, se han sobrepuesto a sus precarias condiciones y han salido avante, siendo claros ejemplos de resiliencia individual, familiar y social, lo que los ha convertido en unos verdaderos héroes para sus comunidades y la nación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario